Chos Malal, un punto de encuentro de viajeros

La emblemática Ruta Nacional 40 cuenta con más de 5.000 km de extensión y corre de manera paralela a la Cordillera de los Andes. Se extiende desde el cabo Vírgenes, en Santa Cruz, hasta el límite con Bolivia en la ciudad de La Quiaca, Jujuy. El punto medio se encuentra en la ciudad neuquina de Chos Malal y es un atractivo turístico en sí mismo, ya que genera un interés especial entre los viajeros que atraviesan el país a través de la mítica ruta «Libertador General Don José de San Martín».

El frente del cartel que se encuentra en el Hito de la Ruta 40 reza: «Chos Malal, llegué al centro». El dorso, en cambio, resguarda las experiencias de viajeros se cruzan y entrecruzan en el camino. El valor simbólico es poderoso por el respeto y la no vandalización: Ningún viajero se sale de la norma ni deja su marca en la parte frontal de la señalización.

Todos se reúnen allí, detrás del cartel, como cubriéndose del viento característico de la Patagonia. Comparten un mate, una charla y la satisfacción de encontrarse con otros que han vivido la misma experiencia: llegar a Chos Malal, a la mitad de la gran Ruta 40, punto medio de un recorrido extenso por la amplitud del territorio argentino.

En el kilómetro 2.623 de la mítica ruta, cada calco, cada sticker, narra una historia. Cuenta la materialización de un proyecto, un viaje y es un emblema para los amantes de viajar.

El hito tiene características representativas y emblemáticas de la zona, como un mástil levemente curvado que simboliza los fuertes vientos de la Norpatagonia y un pedestal con imágenes de Argentina y de Latinoamérica.

La Ruta 40 constituye uno de los principales productos turísticos del país y el hito es una puesta en valor no sólo del camino sino de los símbolos patrios nacionales. Cuenta con mástil de 24 metros de altura, sobre una escarapela de 16 metros de diámetro, con vista panorámica hacia el río Neuquén. La obra, diseñada por el arquitecto escultor Alejandro Santana, está acompañada por estacionamientos y facilidades turísticas como bancos de descanso, iluminación, barandas de seguridad externas e internas y señalización vial, indicativa e interpretativa.

El dorso del cartel que marca el hito está repleto de calcos de los visitantes.